
El joven Bergoglio se enamoró del Ciclón gracias a un equipo fantástico. Primero fue campeón en Argentina y más tarde deslumbró en Europa. La devoción por René Pontoni.
El joven Bergoglio se enamoró del Ciclón gracias a un equipo fantástico. Primero fue campeón en Argentina y más tarde deslumbró en Europa. La devoción por René Pontoni.